Aug 16, 2010

YA PASO!!!

Esta ha sido la fiesta sorpresa más estresada que he organizado porque, aparte de todo lo que significa hacer las cosas a escondidas, las amistades peligrosas que me ofrecieron su ayuda tambien tuvieron problemas, no les digo. Al final de cuentas y después de saborear una rica comida, el vino, el tequila, las margaritas todos nos divertimos. El festejado también estuvo muy contento. Con la edad se ha ido calmando y es posible que para cuando cumpla los 70 años ya no tenga yo que fingir que quiero sorprenderlo, además quien sabe como vamos a andar por esas fechas si a tres o a cuatro patas, asi que desde ahora renuncio, renuncio a otra fiesta sorpresa. Ahora les cuento como se montó el teatro.
David mi hijo asiste a clases de artes marciales y los sábados va de 2 a 4pm. Le dije mira hijo, tu padre cumplirá 60 años y unas amistades peligrosas que lo estiman mucho quieren que le hagamos una pequeña fiesta sorpresa y necesito que tu me ayudes. Ya sabes que a él no le gustan las celebraciones y he pensado que tus clases serán el mejor pretexto para hacerlo salir de casa y en cuanto esté de patitas en la calle, los invitados que estarán escondidos esperando la señal de corránle, colgaremos las decoraciones y pondremos la comida en la mesa. "Ay mamá, por qué yo?", fue lo primero que me dijo. Yo, le contesto, pues porque es lo unico que pienso va a funcionar, entonces vas a fingir que te torciste el pie, no lo puedes apoyar y necesitas ayuda. Ay mamá, no sé si lo pueda hacer. Por qué no, pregunto yo? Es que me va a ganar la risa. Nada más me dijo eso y yo misma comencé a reirme.
Bueno, llega el sábado y le digo David , no se te olvide, voy a hacer como que me llamas y le diré a tu papá que estás mal y que quieres que vaya por ti. En cuanto lo veas empiezas a caminar cojeando. Ay mamá, me dijo otra vez, es que sólo de pensarlo me da risa. Pues te aguantas y te haces el cojito, si no acá en la casa te rompo la pata de a deveras, estamos? Siiiiiii mamaaá.
Sábado, día de compras mi esposo pregunta, vamos a ir a las compras? No, le contesto, casi no necesitamos nada y además mira, ya me creció el bigote y me lo voy a ir a depilar. Ah, porque han de saber que con la edad insisto uno cambia, no es que el amor, los hijos, o el clima lo cambien a uno, no, es el tiempo, así que ahora me acompaña a muchos lados, menos al salón de belleza ni a comprar ropa. Así que ese fue mi primer pretexto para ir a comprar lo que no se puede hacer con antelación para una fiesta sorpresa y de paso me quité el bigote porque me lo deje crecer para tener la justificación, que horror, ya no lo vuelvo a hacer. Cada quien se fue por su lado pero él en auto y yo a pie, no pues que bonito.
Regreso a casa termino de cocinar y a las 3 de la tarde tenía ya todo listo.Preparé carne estilo la que se usa para los "tacos al pastor", frijoles refritos, arroz cremoso, chili con carne y fresas cubiertas de chocolate, que quedaron riquísimas. Aparte tenía ensalada de lechuga y ensalada de frutas. Mis amistades peligrosas traerían el pastel, la gelatina, guacamole, totopos, tortillas, chicharrones de harina para botanear y camarones a la mexicana.
Ese mismo sábado, mi marido compró un mueble y se puso a armarlo justo en la sala!!! Lo veo y le digo pensé que lo ibas a hacer más tarde, para persuadirlo que se fuera a otro lado. No, lo voy a ensamblar ahora me contestó. Bueno.... a las cuatro en punto le digo llamó tu hijo dice que se lesionó y necesita que vayas por él y me doy media vuelta sin esperar su reacción, sólo rogando que me lo creyera. Soltó martillo y tornillos y se fue por David al instante!! Llamo a mis amistades peligrosas y les digo ya salió el señor jalense p'acá!! Pasan 5 minutos y no llegan y me entran los nervios. Vuelvo a marcar y les pregunto qué pasa y me contestan no podemos coger ni un taxi. Ay Dios y el esposo está por llegar. Enseguida recibo un mensaje de David: Ma en dos minutos llegamos. Le marco y le digo dile a tu papa que te lleve a comprar hielo para tu pie hinchado. Ay tu madre, como inventa le dijo. Pero se desviaron a comprar el hielo.
Ya están en casa mis amistades peligrosas y todos como locos comenzamos a inflar y colgar globos, los banderines, repartimos las pistolas con confetti, las cornetas y puff, acabamos dos minutos antes de que el esposo tocara el timbre. Riiinnnnggg. Ay mi madre, ya está aquí donde nos escondemos, aquí, no aquí no, nos va a ver. Acá atras de la puerta. Riiinngg otra vez, ya les digo, todos detras de la puerta. Hola le digo y en eso mis amigos abren las puertas y salen gritando sorpresaaaaaaaa, tututut, fiu fiu. Y el marido ay no, ay no. Feliz cumpleaaaaaños. Abrazos, más abrazos y en eso se acuerda de David y dice ay esperenme voy a ayudar a mi hijo que se torció el pie, y David contesta, no papá, estoy bien y todos nos reimos.

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