ROCK OF CASHEL

Cuando oí por primera vez de la "Rock of Cashel" (la roca de Cashel) me imaginé algo como la piedra aquella en la que el Rey León presenta su cachorro a sus súbditos y me dije, bueeenooo si es una piedrota nada más, ya la veré más tarde como La Quebrada de Acapulco que la conocí casi cuando tenía 12 años. Mas pasaron los días y los meses y la roca se hizo una piedrita en mi cerebro pues la olvidé. En estos días en que nos encontramos huérfanos de hijos, le propuse al esposo salir a ver que tan grande era la piedra y oh sorpresa, la roca es la sede de las ruinas de una preciosa e impresionante catedral, con mucha historia tanto del lado leyenda como del histórico. Aquí les platico en corto las dos. Cashel significa "castle" o sea 'castillo o fortaleza'.

Se cuenta que amaneciendo el año 432 aterrizó San Patricio en este lugar con la misión de cristianizar a los paganos celtas y por medio del bautizo de uno de los reyes los convirtió por ahí del año 450. En ese tiempo existían todavia los reyes de Irlanda y esa roca era usada para sus coronaciones. Aunque también se dice que por ser un lugar super estratégico continuamente y durante cientos de años se lo peleaban los diversos clanes. El último rey de esta región fue Brian Boru y su clan llamabase O'Brien quienes se lo pelearon a los MacCarthy. Brian Boru cedió la roca a un arzobispo y con esto puso a la iglesia de su lado y "aparentemente" no lo atacarían los McCarthy (y se repartirian las ganancias digo yo).

Con un arzobispado en la región del Munster -tierra muy fértil, propia para la agricultura a la que pertenece Cashel- se convirtió rápidamente en centro de peregrinaje, de concentración de poder ecleseástico y de desarrollo económico. La edad del bronce llegaba a su fin y las casitas con techo de paja, los fuertes en forma de anillos de piedra, dieron paso a impresionantes fortificaciones y a iglesias majestuosas.

En el año 1101 se inicia la construcción de la catedral al patrón de Irlanda, San Patricio, de estilo gaélico-romano-gótico. Su entrada principal es un arco romano, decorado con caras que dicen que eran de los mismos albañiles que trabajaban en ella y era su forma de darse a conocer o de trascender a los tiempos. En el transéptico derecho de la capilla, aún se notan restos de frescos son mínimos pero todavía se pueden apreciar unas líneas y figuras en colores rojo y azul. Este último color es lápiz lazulli que en aquella época se extraía en Afganistán únicamente y se importaba a Europa a través de los mercaderes venecianos, todo un milagro ya que las condiciones climáticas de Irlanda, o sea mucha humedad, no los han borrado completamente. Le construyeron unas ventanas aparentes, y un área especial por donde dicen que los leprosos podían acercarse al altary oir misa sin molestar ni ser vistos por el resto de los feligreses.

Sufrió dos incendios, no me acuerdo bien como fue el primero del que se recuperó y hasta con creces pues le agregaron una estancia para el arzobispo, otra catedral y la torre redonda, pero el segundo se debe al malévolo Cromwell, quien odiaba todo lo católico y envió a su general de apellido Inchiquin fijense bien ya llevaba en el apelativo lo que iba a ser en su vida, el general "chinguin". Este tipo se encontraba reclutando muertos, por no decir que andaba atacando todo aquello que estuviera en contra del Rey Carlos I de inglaterra. Cuando llegó a Cashel la gente del pueblo corre despavorida porque sabian lo cruel que era la gente de Cromwell y muchos se refugian en la catedral pensando que respetarían la casa de Dios, lo que aprovecha el "chinguin" para hacer pacas de paja y prenderle fuego, matando a todos los inocentes que se encontraban dentro de ella. Cientos de muertos y la catedral de San Patricio perdida para siempre. Ya no la reconstruyeron.

A los pies de la Rock of Cashel monjes benedictinos erigieron la abadía de Hore que servía como fuerte o carne de cañón a la catedral de arriba. Un día el arzobispo en turno de Cashel que sufría de paranoia los acusó de tramar un compló para matarlo. Lo que sucedía es que los colonos ingleses estaban resentidos porque el Arzobispo le hacia más caso a los irlandeses y como no, al ser super católicos dejaban más limosna. Pues el prelado corre a los pobres benedictinos y posteriormente se ocuparon de ella monjes cistercenses. Como era mal negocio disuelven la orden cistercense y solo dejan dos monjes para que den misa. Pasa el tiempo y la reina en turno Elizabeth I le da esta abadia al Conde de Sussex quien la convierte en casa y con él creo que llega a su fin la abadia de Hore, en inglés Hore Abbey.